Gotokuji, el templo de los gatos.
Hace casi 400 años, un daimyo (samurai dueño de tierras) se refugió de la lluvia debajo de un árbol que estaba cerca de un templo. De pronto, vio a un gato blanco agitando una de sus patas hacia arriba y hacia abajo. Lleno de curiosidad, se acercó a ver al gato y, cuando se alejó del árbol, un relámpago cayó sobre éste.
Li Naotaka (el daimyo) quedó agradecido con el gato (que se llamaba Tama) y entró a platicar con el sacerdote del templo Gotokuji.
Resultó que el templo estaba en decadencia, el sacerdote apenas tenía dinero para comprar comida para él y compartirla con Tama. Naotaka, como agradecimiento, hizo varias donaciones y el templo recuperó su grandeza para no perderla nunca más.
Cuando Tama murió, fue enterrado en el cementerio del templo, dando origen al significado del famoso manekineko.
Hoy, los que tienen algún deseo o necesidad y confían en este amuleto, vienen a Gotokuji y ofrecen una imagen de manekineko.
Así como Tama llevó fortuna al templo, así se piensa que manekineko puede llevar fortuna (y clientes si levanta la mano izquierda) a casas y negocios.
Aunque se tiene la creencia de que este gato tiene su origen en China, todo parece indicar que fue conceptualizado en Japón y adoptado por los negocios chinos.
Así se ve la entrada principal del complejo de Gotokuji, que está en una colonia de Setagaya, en Tokio.
Incensario
También hay una pagoda de tres niveles.
Detalle de la pagoda. Hay varios manekineko en la decoración de la torre.
Los manekineko están alrededor de este salón.
Manekineko asomándose en una linterna ishidoro.
En algún momento se consideró que el manekineko era encarnación de Kannon, la diosa budista de la misericordia.
Aviso amable en la zone que está en mantenimiento.
Los manekineko de todos los tamaños se venden en la tienda del templo. El más barato cuesta 300 yen y el gigante 50,000 yen.
El libre para goshuin tiene a Kannon y manekineko.
El templo es una buena visita si se tienen días extra en Tokio, ya que se necesitan dos cambios de tres y 40 minutos desde los centros de la capital.
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