Detalles de Shinkansen

El tren bala japonés es una de las principales atracciones para los visitantes que provenimos de países en los que los trenes de pasajeros no son tan comunes.

Yo no me canso de admirar al Shinkansen. Después de 8 años de verlo continuamente no puedo dejar de tomarle fotos y maravillarme con todas las ventajas que tiene.

Ojalá que las fotos que siguen ayuden a construir una buena idea de lo que es viajar en este transporte:

Shinkansen de la serie N700 llegando a la estación. En el letrero electrónico de arriba se puede ver el número de corrida del tren, el destino y el número de andén en el que se encuentra.

En las estaciones principales hay muchos andenes para la llegada de Shinkansen, ¡y llegan trenes casi cada 5 minutos!

De igual manera que con los trenes locales, la gente de forma para entrar al tren. Los japoneses están muy acostumbrados a hacer filas y creo que de alguna forma se sienten cómodos en ellas.

Carro número 6 de un Shinkansen. Este es un carro de no fumar.

En el piso enfrente de cada entrada a los vagones hay señalamientos que indican cuál es el número de carro.

En las estaciones grandes en donde varios modelos de tren se detienen hay señalamientos detallados. Lo que pasa es que la mayoría de Shinkansen tienen 16 carros, pero algunos otros tienen solo 8 o 6. Por eso es importante estar atentos a qué tipo de tren se va a subir.

En caso de que llegue el tren y el pasajero se haya equivocado de fila, lo mejor es entrar en cualquier carro. Todos los carros se comunican por dentro, por lo que una vez adentro del tren se puede caminar entre carros para llegar a su asiento. Esta foto es de el detalle de cómo se ven estas uniones desde afuera. Al tocarlo no se siente sólido, más bien como un poco acolchonado.

El interior del Shinkansen se asemeja al de los aviones.

Los asientos así como las maletas en los compartimientos superiores no tienen cinturones de seguridad. 

No ha habido accidentes fatales de Shinkansen.

 Cada asiento tiene su mesa de servicio y una bolsa como en los aviones.

Los últimos modelos de Shinkansen ya tienen enchufes en cada asiento, esto se está instalando en los demás modelos paulatinamente.

El espacio para las piernas es espacioso.

La mesa de servicio tiene toda la información que se pueda necesitar: el carro en el que se encuentra, lugares en donde hay botes de basura, baños, áreas para fumar, desfibriladores, teléfono, asistencia, etc. A los japoneses les gusta tener este tipo de información a la mano. 

Si se viaja con maletas grandes, la recomendación es que se compre un boleto al inicio al final de cada carro, ya que se puede aprovechar el espacio que queda atrás del asiento (o adelante, según el caso) para poner las maletas.

De otra forma, si no se puede "ganar" este espacio, las maletas tendrán que compartir espacio con las piernas del pasajero en su asiento.

Viajar en tren, además de que es más sencillo (no se tiene que llegar 2 horas antes a la estación, no se tienen que documentar nada, etc) permite apreciar muchos detalles en el camino. Paisajes, ciudades, fábricas, etc.

Compartimiento situado enfrente de los baños entre vagones.

Lava manos de un baño de Shinkansen.

Baño de Shinkansen.

Cada tren vende souvenirs de cada ciudad por la que pasa, y también vende obentou (cajas de lunch) con la comida tradicional de cada uno de los destinos que atraviesa. Esto, para los japoneses, resulta extremadamente emocionante. Este es de Osaka y lo pidió Kaori.

Por supuesto, acompañado con cerveza. La caja de obentou cuesta alrededor de 70-100 pesos.

Este otro obentou (que me comí yo) cuesta 40-50 pesos, lo compré en un combini de la estación y también estaba muy rico.

Juguete de Shinkansen para niños, visto en la nueva estación de Shinkansen de Kumamoto.