Un Mexicano en Japón

En Japón los últimos trenes salen entre las 12 pm y 1 de la mañana. Si se está a esas horas cerca de una estación es curioso ver a los últimos grupos de gente corriendo para alcanzar al último tren; después ya se ve muy poca gente caminando, sobre todo en invierno por el frío que hace. Ya estoy preparando un post de "Otousan" y el fenómeno que se dio en Japón con este perro de Softbank. La estación Shinjuku de Odakyu, en Tokio. Esta piedra sí que se ve preocupada. ¿Será porque le han dejado una lata vacía enfrente?

Como en todos lados, cuando en Japón hay algo que se pone de moda todos quieren ser parte de la tendencia, sobre todo en ciudades como Tokyo. Este invierno es notorio que muchas japonesas usan el tipo de botas que tiene la niña que está debajo del reloj amarillo: Son botas largas que cubren hasta 3/4 de la rodilla y que de atrás están abiertas hasta debajo del pliegue de la pierna. Aunque se pueden doblar he visto que todas las usan como se ve en la foto. Aquí otras botas, esta vez en Takeshita dori. Creo que los japoneses aprovechan el clima para sacar todo tipo de combinaciones. Al haber mucho frío se necesita mucha ropa y hay que saber combinarla, cosa que los japoneses saben hacer muy bien. Voy a preparar un post con fotos de gente en las calles para mostrar un poco de la forma en la que los japoneses visten en invierno, bajo unas temperaturas entre -1 y 13 grados centígrados en las ciudades que he visitado. 

Una de las cosas que más llama la atención cuando se llega a Japón es el tamaño de muchos de los coches. ¡Son muy chiquitos! Será que estamos un poco más acostumbrados a los automóviles grandes estilo americano pero la verdad es que llama la atención que algunos modelos son más angostos que una persona con los brazos extendidos: Los modelos como este That's están diseñados para 4 personas. Aunque no lo parece, por adentro es amplio pero para 4 personas, no más. La reglamentación de Japón estipula que si un coche como estos lleva 5 pasajeros debe ser detenido, por lo que la gente no mete más de 4 personas en este tipo de coches, que son muy comunes en todo Japón (no solo en las ciudades grandes). En Japón hasta un Beetle se ve grande. En Japón es raro ver coches de marcas extranjeras.

Me encontré esta calabaza mexicana en un centro comercial de Kumamoto, en Kyushu. Se puede ver la leyenda メキシコ産, que significa "producto mexicano". Me llamó la atención porque no me acuerdo haber visto una calabaza de estas en México, entonces me puse a investigar. Se trata de una hortaliza que se llama "calabaza kabocha" que se cultiva en la parte noroeste de México y toda la cosecha es exportada a Japón. Qué interesante. ¿Alguien la ha visto o comprado en el noroeste de México?

Por favor déjenme presumirles nuestra nueva cámara. Siempre había tenido cámaras digitales compactas (de bolsillo) pero esta vez decidimos comprar una DSLR, ya veremos cómo van saliendo las fotos en lo que la aprendemos a usar. Por lo pronto voy a seguir poniendo fotos con mi cámara actual y también con la nuava cámara. La compramos en Yodobashi Camera y costó lo equivalente a 8,000 pesos mexicanos.

Se podría pensar que en el invierno los japoneses prefieren bebidas distintas a la cerveza, pero no es así. La tradición de llegar a un izakaya y empezar la fiesta con una nama-biru (cerveza de barril) se mantiene aunque en la calle haya temperaturas cercanas a cero grados y hasta nieve. El otro día (antes de que la nieve cubriera Tokyo), Kaori y yo fuimos a un izakaya en Shinjuku con un amigo tokiota que conocí en Canadá, y aquí les dejo unas fotos que tomé ese día. Escogimos un izakaya que está en el sótano de un edificio, cosa muy común por aquí. Llegando pedimos como siempre nama-biru. Un poco de pollo. Mi marca de cerveza favorita sigue siendo Asahi, aunque nama-biru casi cualquiera sabe riquísima. Últimas huellas de las fiestas de temporada en la decoración. Gyouza: si está en el menú siempre termina en mi mesa :) Aquí la especialidad del lugar. Y al final los platos vacíos que insinúan que ya es tiempo de irse. Ese día t...

Si bien de Nagano para arriba las temperaturas son bastante bajas, el invierno japonés en las grandes ciudades como Tokyo, Osaka, Nagoya, etc no es tan crudo como se puede pensar. Eso sí, se tiene que llevar varias capas de ropa encima para no sufrir pero las temperaturas durante el día son generalmente sobre cero, por lo que los japoneses (y sobre todo las japonesas) pueden lucir la ropa a placer. Después voy a subir algunas fotos de la gente en las calles pero por lo pronto les dejo esta foto de dos desconocidos sentados en el metro de Tokyo regresando a casa, con el típico outfit que se usa en esta época del año.

Una de las frutas que más abunda en el invierno japonés es la mandarina (mikan=みかん en japonés). Se come mucho.  La primera diferencia que se percibe entre las mandarinas japonesas y las que se comen en México es el tamaño. En Japón (para no variar) son bastante más pequeñas. La cáscara es mucho más delgada y el sabor es el mismo que tienen las mandarinas mexicanas. La mayoría son muy dulces y nunca tienen semilla, lo que hace que sea más fácil comerlas.  Mandarinas en la parte exterior de un súper en Kyushu. Lo del tamaño sí puede ser una cosa para quejarse porque yo me acabo una mandarina japonesa en 3 mordidas, pero la verdad es que, como se ve en las fotos, el precio no es alto así que se pueden comprar muchas. Por ejemplo, en casa de los abuelos siempre hay una caja como la de la foto lena de mandarinas :D

La verdad es que cuando se usan guantes una de las cosas que más complica la situación es tratar de tocar pantallas touch de teléfonos o tabletas. En Japón me compré unos guantes que tienen algo en la punta de los dedos índice y pulgar que hace que pueda ser reconocido por las pantallas touch. Así, no es necesario quitarse los guantes para usar el teléfono. Esta foto es de un combini. Los míos los compré en UNIQLO, mi tienda de ropa favorita en invierno jaja En este modelo hay un tercer dedo que es beneficiado por esta funcionalidad. En el invierno japonés es necesario llevar siempre chamarras de cuello alto, bufandas y guantes, sobre todo si se va a salir a caminar en áreas donde el viento corre.